domingo, 26 de noviembre de 2006

A medio camino

Tenía tan mala memoria que se olvidó de que tenía mala memoria y se acordó de todo (Ramón Gómez de la Serna)

Hay momentos puntuales en los que creo que estoy escaso de fósforo. Esta tarde, he superado la barrera de la paciencia y he llegado a agobiarme debido a los insignificantes (pero muchos seguidos) hechos que os voy a relatar, pero como estoy escribiendo de madrugada, seré breve con el estilo narrativo.

Cojo el paraguas STOP Cojo las llaves de casa STOP Me pongo el polar que empieza a hacer frío STOP A medio camino de mi destino, me doy cuenta de que me he dejado el móvil en casa, y lo necesito porque me tienen que localizar varias personas STOP Regreso a casa STOP Cojo el móvil STOP A medio camino de mi destino, me vuelvo a dar cuenta de que no llevo conmigo dos cintas de casette necesarias que tenía que entregar esta tarde STOP Me vuelvo para mi casa murmurando "¿por qué? ¿por qué? ¿por qué?..." STOP Cojo una de las cintas STOP Cojo la segunda cinta y observo que tiene la cinta doblada STOP Tierra trágame porque es muy importante la cinta STOP Me convierto en McGuiver y trato de revivir a la cinta STOP El boca a boca no ha funcionado STOP Tendré que quitar el doblez con la mano y con mucho cuidado STOP Al final parece que todo ha ido bien STOP Bajo a la calle de nuevo, llevando la cinta con una mano, mientras voy pasando manualmente la cinta de una ruedecilla a la otra para ver si tiene más dobleces STOP A medio camino (¿qué tendrá esa parte del recorrido? ¿las neuronas del recuerdo que no tengo en mi cabeza?) resulta que me doy cuenta de que olvidé mi paraguas en casa (tuve que arreglar la cinta y para ello, el paraguas estorbaba un poco) y oigo reír a las nubes que están sobre mi cabeza STOP Esta vez no me vuelvo, mojarme ya me dará igual STOP He llegado 20 minutos tarde STOP Al final, mis niñas de Juvecentro me han alegrado el día STOP El teatro me ha desembotado la cabeza STOP Me he tomado dos donuts STOP Cirano ha inspirado a mis labios STOP Y mi cuñado y yo nos hemos ido a dar un paseo con las motos STOP Creo que al final el día ha sido magnífico STOP

14 comentarios:

Javier dijo...

Ahora que me acuerdo... ¿dónde habré dejado el teclado del ordenador?

¡Ah!, lo tengo bajo mis dedos. ¡Qué susto!

Please, don't STOP writting¡.

Un abrazo

Anónimo dijo...

A veces eres "tan tu" que parece que te veo, tus niñas de Jevecentro deben ser estupendas, si alguna vez me no me "busco" ¿puedo acudir a ellas?. Un besazo. Anduría.

Isabel Barceló Chico dijo...

No sé qué ocurre, que no consigo recordar lo que he leído... era bueno, eso sí. Besotess.

Susy dijo...

No sabes como me identifico con lo que cuentas, hasta el punto de que le he dedicado un post.
Hoy ha sido el colmo... no lo cuento por que ando más dispersa aún que cuando pasó.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

En mi pueblo dicen que si no tienes cabeza, debes tener piernas. Pues esto, arriba y abajo

alida dijo...

Uffsss a mí a veces se me olvida todo o casi todo jejeje pienso
Solo se que tengo la cabeza en algún lugar
Saludos con stop

Acus dijo...

Javier, yo estuve buscando un bolígrafo teniendo uno en la mano... ¡Ups! Un abrazo.

Anduría, ¿es que no conoces a mis niñas de Juvecentro? Una de ellas, eres tú. Besis.

Isabel Romana, mi memoria no me permite recordar alguna palabra de agradecimiento, así que te diré la primera que se me pase por la cabeza... ¡Sandía!

Pues Susy, fíjate que al día siguiente me volvió a pasar de forma muy parecida, pero llegando al final de mi destino. ¡Puff! Al menos no se me olvida cerrar la llave del gas... Besis.

Cerillo, cada una de mis piernas deberían ser anchas como camiones..., pero no, son delgaditas (de andar tanto será). P.D: ¿Los de tu pueblo han visto personas sin cabeza? ¡Uy, qué miedo!

Alida, seguro que tu cabeza está guardada en el cajón donde guardas tu alma, tu sangre y tus sensaciones, ese cajón que está alejado de la estantería donde tienes las ideas y la razón. Besos sin stop.

The Froggy dijo...

4+4

Hace un instante tenía algo que escribir, algo interesante, seguro... o no? Ya no me acuerdo.
Sólo sé que tenía algo que escribir... pero se me ha olvidado traer papel y lápiz... mejor, porque no tengo goma de borrar.

Besos olvidados.

Acus dijo...

Yo he olvidado que tenía que olvidar tus besos, Froggy.

MORGANA dijo...

La memoria es el centinela del cerebro. Ups¡¡¡ se me olvidó quién lo dijo.
Besos

ecasual dijo...

Te iba a decir algo pero ya no me acuerdo.

Abrazos

Anónimo dijo...

ufff... a mí lo que me pasa es diferente... tengo memoria para acordarme de lo que tengo que hacer, pero apenas tiempo de realizar las múltiples cosas de las que me acuerdo, con lo cual no sirve de nada, porque siempre voy agobiado por lo que pudo haber sido y no fue. Me acuerdo todos los días de cumpleaños de gente a la que tenía que llamar, pero raras veces tienes hueco para pararte y llamar a esa persona... Paciencia con nosotros mismos, que somos personas humanas jejeje.

Abrazos Javi, todo ha ido bien, ya te contaré. Ahora voy a imprimir lo que me dijiste para leerlo despacio. Gracias por tus palabras, las notas y el correo!

Anónimo dijo...

Hay veces que los días que parecen empezar un poco torcidos se arreglan para terminar siendo unos días estupendos. Claro que tambien suele pasar al revés.

Me alegra que finalmente entre tantas idas y venidas, disfrutases de tu grupo, del teatro y de un paseo en buena compañía en moto.

Saludos!

La próxima vez, apuntate las cosas en la mano, y así.. si no se te olvida mirartela (la mano(lo pongo por si hay mal pensados en la sala)), te acordarás de todo.

Saludos again!

Acus dijo...

Morgana..., ¿qué es la memoria? Yo creo que nací sin ella. Besis.

Pequeña Hormiguita, te iba a responder algo, pero yo tampoco me acuerdo. Un abrazo.

Fran, unos tanto y otros tan poco, ¡qué injusta es la vida! Gracias a ti por contar conmigo, por meterme dentro de tus planes, por tu sincera amistad. ¿¿Pero por qué vives tan lejos?? Abrazos.

Es cierto Perovsquita, el día no es ni malo ni bueno, hasta que llega a su fin, nunca se sabe qué puede pasar en el último minuto. Y en vez de apuntarme las cosas en la mano, me las apuntaré en la frente, para que la gente me las vaya recordando, jajaja. Besitos.