Cualquiera puede dominar un sufrimiento, excepto el que lo siente (William Shakespeare)
Un grito desgarrador se oyó al otro lado de la puerta. Con el cuerpo en tensión, los que se encontraban en la pequeña sala circular, no podían ocultar su nerviosismo. Los lamentos y quejidos eran cada vez más desesperados.
Un grito, esta vez entrecortado por las lágrimas, se oyó. Su tiempo se estaba agotando, y eso lo sabían todos, y todos entrarían por aquella puerta esa oscura tarde...
Un grito, ya sin apenas fuerzas, traspasó la puerta. Al poco, el silencio se hizo tan intenso, que los oídos empezaron a sentir dolor. Nadie se movía. Todos sabían que habían acabado con él.
- ¡Qué afortunado ha sido! ¡Han estado muy poco tiempo con él! - susurró uno de los jóvenes que se encontraban en aquella sala.
La puerta se abrió crujiendo su madera. El chico que había hablado anteriormente, se levantó sin demasiada prisa. Era su turno. Se oyeron suspiros de alivio, aunque, sabían que era un simple aplazamiento, ya les tocaría a ellos.
Avanzó hacia la puerta casi arrastrando sus piernas. Éstas estaban contraídas de los nervios. Cruzó el umbral, y la puerta se cerró con un golpe seco.
En la sala, uno de los jóvenes tuvo el valor de hablar, y lo hizo tan bajito, que otro se acercó para escuchar lo que decía:
- ¿Son ciertos los rumores que he escuchado?
- Sí. Es su primer día depilando...
"El grito", de Acus.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
17 comentarios:
Me hacen mucha gracia los hombres en general, cuando hablan de la depilación. Tengo amigos que dicen, como si ellos lo hubieran hecho toda su vida: "Mejor con cera, no?"
Ahora... no les digas a ellos que tienen que quitarse un pelito con las pinzas, que el grito de exhalan...
¿Quienes son las nenitas?
Jajaja, que buenoooooooooooo.
Y eso que no se han depilado el bigote o las ingles, que eso duele un porrón.
Este relato me ha hecho sonreir, muchas gracias.
Besazos
Jajajaja. Tremendo, como siempre. Yo pensé que se trataba del dentista, pero me has sorprendido una vez más, como siempre :)
Gracias por las risas.
Un besazo!!!!
Qué bien te depilas las ideas. Más que depilar pareciera que las destilaras con el alambique de la genialidad.
Un abrazo, talento.
Perovsquita, no te quito la razón: ¡¡¡por supuesto que somos unas nenitas!!! Yo uso las pinzas para el entrecejo (y pica que no veas...)
P.D: Mejor la cera caliente, ¿no? Jejeje.
Golifre, la depilación del bigote o las ingles, creo que está reconocido por la Unión Europea como "Tortura Absoluta". Y ni me lo quiero imaginar. AAAAYYYYYY!!!
Froggy, reconozco que el dentista fue mi segunda opción, pero mis (ahora) suaves axilas han incentivado mi primer pensamiento. Un beso muy grande, mi luna.
Javier, ahora tengo que volver a esperar a que me crezcan las ideas de nuevo..., si va a ser mejor que use la cuchilla para tener así todos los días una... Y gracias por prestarme tu alambique, genio, que eres un genio.
Primero imagine una especie de tortura, de crimèn al final suspire!!!! Genial, me gusto...los hombres el sexo fuerte??? Saludos
Ha resultado genial acus. Estaba por darle la razón a Shakespeare, pero al seguir leyendo me he desternillado de risa. Besos.
Jajajajajajajaaaaaaaaaaaaa...
Que gracioso jajaja, cuando yo me casé (la primera vez)por primera vez me depilé y lo pasé tan mal... que fuí a la boda con una sola pierna depilada jajajaja.
Me alivia pensar que nunca pasaré por esto, aunque reconozco que la gente depilada queda menos simiesca.
saludo acus, eso de Shakespeare es muy cierto, claro que hay muchas formas de gritar.
Im...presionante. Buenísimo, de verdad.
No sé yo si eso de la depilación masculina va conmigo, fíjate.
Un grandísimo abrazo
Buenisimo, siempre hay opciones,
depilación laser? que más da no?
Eres genial Acus, siempre logras
que sonria.
Muchos besos.
...jejeje... me ha encantado el contrapunto entre la maravillosa frase de Shakespeare y tu frase final!...
...que cierto, TODO, -hasta el dolor-, es relativo... ¡un abrazo!
Brisa Marina, eso pretendía, crear un ambiente de tensión, para luego, la guinda final. Y está demostrado que los hombres no somos el sexo fuerte (en todo caso, el sexo quejica). Besis.
Isabel Romana, me alegra que te hayas reído, no como el pobrecillo que sufría tras la puerta... ¿No serías tú la que depilaba? ¿Y por eso te ríes? Un abrazo.
Angelusa, gracias por contagiarme tu risa, que lo dice todo.
Jajaja, Susy, qué bueno. Y yo que creía que las mujeres tenían el gen de "aguantar-todo-el-dolor-que-haga-falta". Supongo que la depilación está por encima de ese gen, je.
Cerillo, hay algunos que parecen pollos desplumados..., y tener que pagar para pasar un mal rato es algo que está muy presente en la cabeza de los chicos...
Sí, Mariana, incluso con la mirada puedes gritar si te lo propones. Yo también estoy de acuerdo con Shakespeare.
Tanhäuser, para gusto, los colores. Mientras que no llegue a convertirse en una obsesión... Yo es que no le puedo negar esto a mis axilas, nunca les niego nada. Quizá sea un blandengue por no poder contradecirlas, o quizá sea un tipo duro y sin escrúpulos por enfrentarme sin vacilar a la ejecución de mis amadas vellosas axilas. Gracias por tus palabras amigo.
Morgana, hay otros métodos como teñirte el pelo color piel para que pasen desapercibidos, o no quitarte la camiseta para meterte en la piscina..., pero claro, esto resulta más engorroso, la verdad... Dulces palabras me dejas, y te lo agradezco enormemente.
Claullitriche, ¡a mí me ha encantado que te encante! Y el dolor será todo lo relativo que quieras, pero para obviarlo, se necesitan altas dosis de concentración, esfuerzo y, por qué no, insensibilidad. ¡Besotes!
Uyyy, así mismo me siento yo cada vez que voy a la estética, jejeje.
Es que, Monique!, según quien te lo haga, duele que no veas...
Publicar un comentario